Sube a cinco el balance de fallecidos por el aluvión en Ischia
El Gobierno italiano declara el estado de emergencia mientras prosiguen las operaciones de búsqueda de los siete desaparecidos
No cesan las operaciones de búsqueda en la localidad de Casamicciola, ubicada en la isla de Ischia, frente a la ciudad italiana de Nápoles, para tratar de encontrar supervivientes después de que un gigantesco alud de barro provocado por las lluvias torrenciales dejara ayer 12 desaparecidos y afectara a decenas de viviendas, provocando que 167 personas tuvieran que dejar sus casas. De momento son cinco los cuerpos sin vida encontrados entre el fango y quedan siete desaparecidos, que forman parte de dos familias y entre los que hay al menos dos menores de edad.
Además del cadáver de Eleonora Sirabella, de 31 años, localizado pocas horas después de la tragedia bajo un metro y medio de barro, este domingo fueron encontrados los restos mortales de otros cuatro desaparecidos. Se trata de una niña de entre 5 y 6 años, de una anciana y de otros dos vecinos de las que no se ofrecieron más datos. Los socorristas consiguieron además encontrar en buen estado de salud a tres personas, entre ellas dos ancianos, que habían quedado aislados debido al aluvión en una zona de difícil acceso, aunque no se les había dado por desaparecidos.
Un día después del desastre, el Gobierno de Giorgia Meloni celebró hoy un Consejo de Ministros extraordinario en el que declaró el estado de emergencia para la zona afectada durante un año y aprobó un primer paquete de ayudas valoradas en dos millones de euros. Según prometió el ministro para el Sur y responsable de la Protección Civil, Nello Musumeci, se dedicarán más fondos «una vez que se haga un reconocimiento de los daños y de las exigencias inmediatas» de la población de Casamicciola. También habrá un plan especificó para reconstruir las viviendas y edificios públicos dañados por el aluvión. Meloni, por su parte, prometió que visitará la localidad en cuanto sea posible y mostró su solidaridad con la población afectada al tiempo que agradecía la labor de los equipos de socorro.
No es un caso aislado
La tragedia vivida en Ischia no es un caso aislado en Italia, donde resulta relativamente habitual que las lluvias torrenciales provoquen avalanchas que dejan tanto muertos como importantes daños materiales. El anterior tuvo lugar a mediados de septiembre en la región de Las Marcas, en la costa adriática, y dejó doce muertos y una persona que todavía sigue desaparecida. Los daños materiales se valoran en 2.000 millones de euros. Según prevén los meteorólogos, los episodios de lluvias torrenciales resultarán cada vez más habituales debido a las consecuencias de la emergencia climática. También contribuye a estos desastres la construcción ilegal de viviendas en zonas de riesgo, como recordó Vincenzo De Luca, presidente de Campania, la región a la que pertenece Ischia. «La gente debe entender que en algunas áreas no se puede vivir», advirtió De Luca.
Para tratar de responder a este problema el Gobierno anunció la creación de un grupo de trabajo multidisciplinar que estudiará cuáles son las localidades con mayor riesgo y las posibles soluciones a adoptar.