El activismo climático contra Elon Musk: casi 1.000 personas se movilizan para paralizar la fábrica de Tesla en Alemania
El proyecto fue tan deseado por las administraciones locales y nacionales como detestado por gran parte de los vecinos, pero los tribunales decantaron la balanza en favor de la compañía liderada por Elon Musk. Ahora, el magnate prepara la expansión de la planta, unos planes que están movilizando la indignación masiva del activismo climático en Alemania.
En abril, activistas climáticos ocuparon temporalmente la planta de Mercedes en una localidad cerca de Bremen como denuncia contra la elevada contaminación que producen los coches de lujo de la marca alemana. Un mes antes, Tesla se vio obligada a detener la producción de la planta tras un incendio provocado contra una subestación eléctrica. El ataque fue reivindicado por la organización izquierdista ‘Grupo Volcán’. “O son los ecoterroristas más tontos del mundo o son marionetas de quienes no tienen buenos objetivos medioambientales”, exclamó Musk. Aunque no fue a más, la interrupción infligió a la compañía pérdidas estimadas en “varios cientos de millones de euros”. La Fiscalía Federal lo está investigando como posible atentado terrorista.
Denuncia climática
Los manifestantes convocados para la protesta se unirán estos días a los 80 activistas que, desde hace semanas, ocupan una docena de casas en los árboles del bosque que Tesla quiere sacrificar para ampliar su fábrica. Los políticos locales apoya el plan de Musk, pero la mayoría de los vecinos no. Tras la presión, la compañía anunció a mediados de marzo que talaría 47 hectáreas de bosque en lugar de las 100 iniciales, un cambio insuficiente para los opositores.
Los críticos temen que el uso de productos químicos pueda contaminar las aguas residuales e impactar tanto la flora como la fauna de la zona. La Asociación del Agua de Strausberg-Erkner (WSE) denunció en febrero que Tesla habría vertido al sistema de Grünheide hasta seis veces más de fósforo y nitrógeno refractarios —sustancias peligrosas— de los permitidos, según un informe visto por el medio Stern. La compañía explicó que esa concentración de contaminantes se debería a que recicla “hasta el 100%” de sus aguas industriales.