Crisis migratoria en la UE: ¿qué sabemos sobre lo que ocurre en Lampedusa?
plan de 10 puntos. De los 10, algunos van en la línea de ayudar a Italia a gestionar la situación: el apoyo de la Agencia de Asilo de la Unión Europea (EUAA) para el registro y la recepción, el traslado de personas desde Lampedusa, incluido el uso del mecanismo de solidaridad de la UE, y la referencia a alternativas que incluyen habilitar rutas seguras para que los migrantes no recurran a rutas peligrosas.
Pero también hay medidas discutibles, como el apoyo a procedimientos rápidos de clasificación y expulsión y emitir prohibiciones de entrada, así como encontrar formas de eludir la evaluación individual de las solicitudes de asilo o adoptar el “enfoque basado en rutas”, una manera de intentar que Europa desvíe sus responsabilidades a otra parte en la ruta, es decir, a Túnez, Libia o Níger, lugares poco seguros.
Desde la visita de Ursula von de Leyen a Lampedusa hace unos días, circulan rumores de que la UE está considerando una nueva misión naval en el Mediterráneo para establecer un bloqueo naval de dudosa legalidad que impida la llegada de migrantes.
Para ello es esencial establecer un mecanismo regional acordado con los Estados costeros sobre la división de responsabilidades para el desembarco y con los Estados no costeros sobre la reubicación. En relación con esto, hay que señalar que en el último año la mayoría de los Estados miembros no han reubicado ni a un solo refugiado.
Además, el acuerdo migratorio con Túnez ha generado malestar entre los Estados miembros, tanto por el procedimiento para su aprobación como por su contenido. El Parlamento Europeo ha planteado preguntas y preocupación sobre el alcance de la cooperación.