La mafia calabresa se sienta en el banquillo
«Es importante que el proceso se celebre en Calabria, donde se han producido los crimenes, segun nuestro punto de vista. Es una señal para que la gente entienda, sin excusas para nadie, que puede fiarse de nosotros y que podemos dar respuestas». Nicola Gratteri, fiscal de Catanzaro y figura de referencia en la lucha contra el crimen organizado, celebro con estas palabras el inicio este miercoles del macroproceso contra la ‘Ndrangheta, la mafia italiana mas poderosa y con ramificaciones en negocios legales e ilegales en medio mundo.
El juicio, que se desarrolla en un aula bunker construida para este fin en la localidad calabra de Lamezia Terme, es el mas importante contra una organizacion mafiosa desde el que tuvo lugar en los años 80 del siglo pasado contra la Cosa Nostra siciliana. Que se celebre en Calabria reafirma la presencia del Estado en una region donde los clanes de la ‘Ndrangheta ostentan el control en buena parte del territorio.
Los mas de 300 imputados, entre los que ademas de capos criminales y sicarios hay empresarios, profesionales, policias corruptos y politicos, estan acusados de pertenencia a asociacion mafiosa, homicidio, extorsion, usura y lavado de dinero negro, entre otros delitos. El macroproceso desvela la capacidad de la ‘Ndrangheta para infiltrarse en la economia legal y en la politica para proteger sus intereses y reinvertir los beneficios de sus negocios ilicitos.
Las cifras del juicio dan una idea de su magnitud e importancia. El aula bunker, construida siguiendo las normas contra la pandemia, puede albergar a 1.000 personas manteniendo la debida distancia y permite ademas realizar 150 conexiones de video de manera simultanea. Participan cerca de 400 abogados en el proceso, por el que desfilaran unos 60 mafiosos arrepentidos que han pasado a colaborar con la justicia. Entre ellos hay familiares directos y la antigua compañera sentimental de algunos capos, lo que muestra que la ‘Ndrangheta tambien es vulnerable a las filtraciones, algo poco habitual hasta hace pocos años debido a los lazos de sangre entre sus miembros.